Si eres un entusiasta de la impresión 3D, sabes lo tedioso que puede ser nivelar manualmente la cama de impresión antes de cada impresión.
Afortunadamente, hay una solución: un sensor de nivelación de cama (Amazon).
Con un sensor de nivelación de cama, puedes olvidarte de la tediosa tarea de nivelar la cama manualmente y concentrarte en lo que realmente importa: crear impresiones de alta calidad.
Otra opción, quizá la mejor de todas, es adquirir una impresora 3D con función de nivelación automática.
Los 2 mejores sensores
Cómo funciona la nivelación automática
Entender la nivelación de la cama es crucial para lograr impresiones 3D consistentes y exitosas.
En impresoras más económicas, como la Ender 3, puede ser necesario ajustar manualmente los tornillos de nivelación, un proceso que puede resultar tedioso.
Sin embargo, algunas impresoras ofrecen una solución: la nivelación automática de la cama.
Esta característica permite que la distancia entre la cama de impresión y la boquilla se ajuste automáticamente antes de cada impresión, asegurando una adherencia adecuada sin aplastamientos.
La nivelación correcta de la cama es esencial para obtener la primera capa precisa, lo que marca la diferencia entre una impresión exitosa y una problemática.
Si buscas una experiencia de impresión más sencilla y precisa, considera una impresora con nivelación automática.
Estas impresoras utilizan sensores para medir la distancia entre la cama y la boquilla antes de imprimir, ajustando la posición de la boquilla en función de esta información.
Esto crea un «mapa topográfico» virtual de la superficie de construcción, garantizando una nivelación constante y simplificando el proceso.
Incluso si tu impresora no cuenta con un sensor de nivelación automática, puedes instalar uno por tu cuenta para disfrutar de la conveniencia de no tener que nivelar manualmente la cama.
Además, la nivelación automática es especialmente útil si tu placa de construcción está ligeramente deformada, ya que la impresora ajustará la boquilla según sea necesario, adaptándose a cualquier irregularidad en la superficie.
Tipos de sensores
Los sensores de nivelación automática vienen en todas las formas, tamaños y costes.
Analicemos los diferentes tipos de sensores, comprendamos su tecnología y comparemos sus ventajas y desventajas para ayudarte a descubrir la mejor opción para ti.
Capacitivo
Un sensor capacitivo es una herramienta indispensable en el mundo de la detección sin contacto.
Este tipo de sensor funciona midiendo la capacitancia, o capacidad de almacenamiento de energía de un condensador.
La cantidad de energía almacenada cambia cuando el objeto a detectar se coloca cerca de la cara de detección del sensor.
De esta manera, el sensor capacitivo puede detectar objetos de manera rápida y precisa.
Este tipo de sensor es sumamente versátil, ya que funciona en superficies metálicas y no metálicas, incluso en aquellas que son transparentes como el vidrio.
Su capacidad para detectar cualquier tipo de superficie se debe a su capacidad para detectar cualquier material cuya constante eléctrica de troquel sea mayor que la del aire.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que los sensores capacitivos son altamente sensibles a los cambios de temperatura, humedad y tipo de superficie de construcción.
Cualquier cambio en estos factores puede afectar la distancia de detección del sensor y, por lo tanto, el nivel de la cama.
Si imprimes principalmente en superficies de vidrio como yo, entonces el sensor capacitivo es una excelente opción para ti.
Sin embargo, si necesitas cambiar constantemente la superficie de construcción, es posible que desees considerar otros tipos de sensores que sean más adecuados para tus necesidades.
Al utilizar un sensor capacitivo, asegúrate de mantener los factores ambientales constantes para obtener los mejores resultados posibles en la detección de objetos.
Inductivo
Un sensor inductivo es una herramienta sin contacto que se basa en el principio de inductancia eléctrica para su funcionamiento.
Los sensores inductivos son dispositivos altamente especializados que permiten detectar objetos metálicos cercanos mediante la generación de un campo magnético que se modifica al acercarse a la superficie metálica del objeto.
Si buscas una solución para detectar objetos metálicos sin tener que preocuparte por el desgaste o el contacto físico, un sensor inductivo es la opción ideal.
A diferencia de otros sensores, como los capacitivos, los sensores inductivos pueden operar de manera efectiva en un entorno abierto sin necesidad de protección adicional, lo que los hace una excelente opción para aplicaciones industriales.
Además, es importante tener en cuenta que, al igual que los sensores capacitivos, los sensores inductivos deben ajustarse para compensar los cambios en la temperatura y la humedad.
Sin embargo, una vez que se han realizado los ajustes necesarios, estos sensores pueden proporcionar mediciones precisas y confiables.
Sensor de Efecto Hall
Este tipo de sensor cuenta con un pasador de émbolo de plástico retráctil, que contiene un imán, así como un sensor de efecto Hall.
Cuando el sensor hace contacto físico con una superficie, el pasador de plástico se retrae, lo que produce un cambio en el campo magnético que es detectado por el sensor de efecto hall y expresado en voltios.
A diferencia de otros sensores, el sensor físico de efecto Hall no se ve afectado por los cambios de temperatura y humedad, lo que lo hace ideal para su uso en una amplia gama de entornos y condiciones.
Si bien este tipo de sensor puede ser un poco más lento que otros sensores, debido a sus partes mecánicas móviles, su simplicidad hace que sea menos probable que falle o se rompa.
Además, las sondas de plástico que vienen con este sensor están diseñadas para doblarse en lugar de romperse, lo que significa que duran mucho tiempo.
Uno de los sensores físicos de efecto Hall más populares es el BLTouch, que funciona en todas las superficies y no se ve afectado por la temperatura.
Si estás buscando una configuración de sensor fiable y duradera, te recomendamos encarecidamente que lo consideres para tus necesidades de detección de superficies.
Sensor de infrarrojos
Un sensor infrarrojo (IR) es un dispositivo electrónico altamente eficiente que puede ayudarte a medir y detectar la radiación infrarroja presente en el entorno que te rodea.
Con él, puedes obtener información valiosa sobre cualquier objeto cercano.
¿Sabías que la luz infrarroja del LED puede reflejarse en un objeto y ser detectada por el receptor del sensor?
Gracias a su tecnología avanzada, el sensor IR puede detectar imperfecciones en superficies metálicas y no metálicas, e incluso funcionar en superficies de vidrio, aunque se recomienda un respaldo mate para una mejor precisión.
En comparación con los sensores capacitivos e inductivos, el sensor IR es mucho más preciso en la medición de la altura de la superficie superior de una cama de vidrio en lugar de la distancia a una placa de respaldo.
Esto lo hace ideal para su uso en áreas donde el espacio es limitado, como debajo del efector de una impresora delta.
Con el sensor IR, puedes contar con mediciones de alta calidad y precisión para optimizar tus procesos de producción y asegurar la calidad de tus productos finales.
¿Cuál es más preciso?
Los sensores capacitivos, inductivos y de efecto Hall físico son bastante similares. Sin embargo, el sensor capacitivo es ligeramente inferior en precisión en comparación con los otros.
Por otro lado, el sensor infrarrojo (IR) tiene una precisión un poco mayor, mientras que el piezoeléctrico montado en el hotend es el más preciso de todos.
Es importante mencionar que, si necesitas una gran precisión, el sensor capacitivo no sería la mejor opción.
Sin embargo, recomendamos el uso de sensores de efecto Hall físico, como el BLTouch, ya que estos sensores no se ven afectados por la superficie de construcción, ya sea de vidrio, magnética, etc.
Esto se debe a que tienen una sonda que funciona mecánicamente, lo que los hace altamente versátiles.
Velocidad de Sondeo
Los sensores inductivos y capacitivos tienen la velocidad de sondeo más alta porque ambos son sensores sin contacto y no tienen que sondear o desplazarse hacia arriba y hacia abajo para hacer contacto físico con la cama de impresión para obtener la distancia ideal.
Durabilidad
Todos los sensores son bastante duraderos. En teoría, los que tienen las partes móviles, como el sensor físico de efecto Hall, tienen más posibilidades de fallar debido al desgaste.
No obstante, sus mecanismos son extremadamente simples y las sondas están diseñadas para doblarse en lugar de romperse, lo que las hace muy duraderas.
En nuestra opinión, hay una mayor probabilidad de que tenga que reemplazar su impresora antes de que sea necesario reemplazar los sensores de nivelación automática de la cama.
Velocidad de Detección
Cuando se trata de la velocidad de detección, los sensores inductivos y capacitivos se destacan.
Esto se debe a que ambos son sensores sin contacto y no requieren un movimiento ascendente o descendente para hacer contacto físico con la superficie de impresión y obtener la distancia óptima.
Resistencia al Desgaste
En cuanto a la durabilidad, todos estos sensores son bastante resistentes.
Aunque en teoría, los sensores con partes móviles, como el sensor físico basado en el efecto Hall, podrían tener una mayor propensión al desgaste, en realidad, sus mecanismos son sumamente simples.
Además, las sondas están diseñadas para flexionarse en lugar de romperse, lo que las convierte en componentes muy duraderos.
En nuestra evaluación, es más probable que necesite reemplazar su impresora antes de considerar la sustitución de los sensores de nivelación automática de la cama.
Versatilidad
El sensor físico basado en el efecto Hall demuestra ser más versátil en comparación con los sensores conductivos e inductivos.
Este sensor es capaz de detectar cualquier tipo de superficie, independientemente de su composición, forma o tamaño. Además, su desplazamiento en el eje Z no se ve afectado por variaciones en la temperatura y la humedad.
La mayoría de los sensores, a excepción del sensor inteligente 3D Duet, así como los sensores piezoeléctricos montados en el extremo caliente y debajo de la superficie de impresión, cuentan con una sonda Z separada.
La altura relativa entre la boquilla y la sonda Z puede variar si la cabeza de impresión se inclina durante su movimiento en el plano XY.
Para minimizar este efecto, se recomienda montar la sonda Z lo más cerca posible de la boquilla.
En este contexto, los sensores de infrarrojos (IR) presentan una ventaja, ya que son lo suficientemente ligeros y compactos como para ser instalados en proximidad a la boquilla, lo que garantiza mediciones más precisas y una mayor estabilidad en la cabeza de impresión.
Nuestra Conclusión
En el universo de la impresión 3D, para aquellos que se adentran por primera vez y no cuentan con una amplia experiencia en el ámbito de la electrónica o en la configuración precisa de las sondas, mi recomendación principal es optar por el BLTouch.
Este dispositivo ha sido sometido a rigurosas pruebas por una amplia comunidad de entusiastas y ha demostrado su fiabilidad en numerosas ocasiones.
Además, destaca por su facilidad de instalación, superando en este aspecto a otras alternativas disponibles en el mercado.